La compañía ha modernizado un edificio de viviendas instalando una solución de energía renovable a partir de biomasa, junto con un sistema de regulación y control, que permite telegestionar la instalación vía web y conseguir ahorros de hasta un 40%.
Schneider Electric ha llevado a la práctica el Internet de las Cosas en un edificio de viviendas en Cáceres gracias a la instalación de una solución de energía renovable a partir de biomasa, junto con un sistema de regulación y control, en una comunidad de vecinos de la avenida Virgen de Guadalupe, en pleno centro de la ciudad.
Esta solución ha permitido sustituir los sistemas actuales de calefacción y agua caliente sanitaria de gasoil del inmueble con el fin de monitorizar la instalación y así poder optimizar las necesidades del edificio y reducir los consumos; con esta implementación, los propietarios de las viviendas podrán ahorrarse hasta un 40% de ahorro energético, sacar el máximo partido del uso de equipos e instalaciones y ahorrar también en mantenimiento.
Se trata de la primera comunidad de propietarios de Extremadura que implanta este tipo de tecnología, tanto en calderas de biomasa de gama alta, del fabricante Eta Heiztechnik, como en el sistema de control EcoStruxure Building de Schneider Electric, elegido por segundo año consecutivo como mejor software de gestión de energía del mundo por la firma Navigant Research.
La instalación, realizada por Aprosol (empresa de la red EcoXpert de Schneider Electric), cuenta con dos calderas de biomasa modelo HACK90 con sistema de alimentación mediante tornillos sinfín, con dos depósitos de inercia que aportan calefacción y agua caliente sanitaria a todo el edificio de vecinos.
Además del automatismo y el sistema de control de estas calderas, se ha implantado un sistema de regulación y control externo basado en Automation Server, que permite telegestionar la instalación desde cualquier dispositivo comunicable por web (smartphone, PC, tableta, etc), además de otras ventajas.
Por ejemplo, el nuevo sistema permite ahora detectar averías en tiempo real, ahorrar energía gracias a la programación a medida y la supervisión constante de la instalación. Además, posibilita una monitorización continua, ya que sus responsables pueden conectarse por Internet a sus instalaciones para comprobar y analizar sus consumos, sus rendimientos, horarios de funcionamiento, etc.; en suma, el Internet de las Cosas (IoT) en una instalación real.
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